¿CÚAL ES EL MEJOR MARKETING EDUCATIVO DEL MUNDO?
El mercantilismo hoy en día, alcanza desafortunadamente a todos los sectores. El sector educativo no iba a ser menos y muchos centros compiten ya por conseguir, por unas u otras razones, el mayor número de matrículas. ¿Cómo conseguimos “vender” nuestro centro educativo? A continuación os presento algunas claves poco técnicas pero muy humanas.
El marketing educativo hace referencia al marketing orientado a centros educativos que desean posicionarse en el mercado, a través fundamentalmente, de la comunicación de los servicios que prestan dirigidos a sus clientes principales: alumnos-padres actuales y potenciales. Sin olvidar los clientes internos: el profesorado. Un marketing que se debe plantear estratégicamente y de acuerdo a los valores o filosofía de cada centro.
Muchos centros educativos plantean el Plan de Marketing y Comunicación como una de las bases necesarias para su sostenibilidad actual y futura. Un marketing que trata de diferenciar a unas escuelas de otras mediante múltiples herramientas: publicidad, redes sociales, publicaciones periódicas, servicios extra-escolares, recursos tecnológicos, “nuevas” metodologías, etc… Por desgracia, las sinergias entre diferentes escuelas o institutos no están a la orden del día. Esto daría para otro artículo.
Pero, ¿cuál es la mejor estrategia de marketing para un colegio, instituto, escuela o universidad? Sin duda alguna, no se trata de estar más o menos presente en las redes sociales del momento. No se trata de invertir en un mayor número de dispositivos móviles o pizarras digitales. No se trata de programar más horas lectivas en inglés o en otros idiomas. No. El mejor marketing educativo está en manos de cada uno de los profesores que forman parte de la escuela.
Parece una perogrullada, pero la estrategia de comunicación más idónea de un centro educativo empieza y acaba en sus docentes. Para ello necesitamos docentes motivados y los centros deben preguntarse qué necesitan sus profesores. No todo es evaluar o pasar pruebas y encuestas a padres, alumnos y docentes. ¿Por qué no preguntar qué necesitan los profesores para mejorar en su trabajo? Si queremos construir una experiencia inolvidable en nuestros alumnos necesitamos docentes motivados que estimulen el aprendizaje del alumno.
Otra de las bases de una estrategia ideal de marketing educativo se halla en la experiencia vivida por el alumno en las aulas de su centro educativo. Un alumno con profesores memorables es una herramienta de comunicación que no tiene parangón. Para ello, no podemos centrar el objetivo principal de las escuelas en la obtención de resultados en las diferentes pruebas nacionales e internacionales. La estrategia del centro debe orientarse hacia las necesidades individuales de cada alumno. Para ello es indispensable un profesorado cercano y preocupado por sus alumnos, capaz de empatizar con cada uno de ellos.
Los centros que trabajan estos valores de inclusión e integración a través de la acción del profesorado, tienen mucho avanzado en relación a su estrategia de marketing o comunicación. No obstante, no hay que dejar de lado las otras herramientas marketinianas, pese a que nuestra materia prima -los alumnos- van más allá de cualquier técnica de gestión empresarial. Un alumno satisfecho, si seguimos hablando de satisfacer necesidades, es un alumno que recordará con aprecio y cariño su paso por esa escuela; un alumno consciente del valor de lo aprendido y de esa conexión especial que disfrutó con sus profesores.